La obsidiana negra es uno de los maestros más importantes de la Nueva Era. Se asocia con el primer chakra y está vinculado a la tierra, a lo físico, a la supervivencia y a la realización del ego. La Obsidiana negra es como un imán capaz de atraer las fuerzas espirituales hacia el cuerpo, para que obedezcan entonces al control activo de la conciencia. Cuando estas energías cobran forma en el mundo, mejoran la calidad de la vida, infundiendo al plano físico una fuerza luminosa acrecentada. Si aplicas Obsidiana negra al primer chakra, las energías más sutiles de los chakras superiores descienden hasta los centros primigenios para purificar y refinar el ego.
La Obsidiana negra sólo debe emplearse si se conocen sus poderes y si pueden asimilarse, pues exige, implacablemente, una serie de cambios por parte del individuo. Gobernada por Plutón, la Obsidiana negra pretende guiar la mente a través de las zonas oscuras del subconsciente hasta establecer una identidad con la supraconciencia. En tanto que maestro plutoniano, no contempla el ego. Lo denuncia sin miramientos, indicando qué paso debemos dar para avanzar otro poco en el crecimiento evolutivo personal. Sirve de espejo para reflejar el fluir real de nuestra naturaleza, exagerando los miedos, inseguridades y comportamientos egocéntricos que oprimen las virtudes supremas del alma. La Obsidiana negra, “ Guerrero de la Verdad “, enemigo implacable de la ilusión, da vida a la visión de la Nueva Era de Acuario. Entonces los seres humanos vivirán de acuerdo con los designios de una conciencia superior y unificada, el denominador común, suma verdad y patrimonio de toda la humanidad.
La obsidiana negra es eficaz en el tratamiento de las depresiones, estados de ansiedad y nervios. Alivia la tensión. Junto a la cama, expulsa el estrés mental y las tensiones, con un efecto calmante. Fortalece en tiempos de necesidad y forma un escudo contra la negatividad. Elimina los bloqueos energéticos.
Permite ver la causa de la enfermedad. Está indicada contra los dolores localizados; reduciendo el dolor de la artritis y el reuma. Actúa sobre las energías del bajo abdomen. Puede usarse para reducir una próstata agrandada. Facilita la digestión física (ayudando también a digerir cualquier cosa difícil de aceptar en el ámbito emocional). Desintoxica. Reduce los calambres, las lesiones y los problemas de articulaciones. Alivia el dolor, y detiene las hemorragias; mejorando la circulación y el endurecimiento arterial. Calienta las extremidades. Absorbe la polución medioambiental, y las energías negativas del entorno (aunque no debemos de olvidar su cualidad a veces devastadora de sacar la verdad a la luz).
Es extremadamente útil para terapeutas, pues limpia las energías liberadas en los procesos de sanación (su elixir ayuda en estados de shock).Por ser un mineral de origen volcánico se le relaciona con el elemento fuego y se considera una piedra de auto conocimiento con carácter terapéutico, es decir, una “piedra que actúa al igual que un espejo cuya luz hiere a los ojos del ego, que no desea ver su propio reflejo”. Las cualidades de la obsidiana nos impulsa a crecer, y nos presta un sólido apoyo mientras lo hacemos. Es potenciadora de la verdad, se la conoce como la piedra de la justicia. Despiadada a la hora de exponer nuestros fallos, debilidades y bloqueos; nada puede esconderse a la energía de la obsidiana. Por eso hay que manejarla con cuidado, siendo aconsejable usarla bajo la guía de un terapeuta cualificado. Pues si trabajamos con ella puede sacar con rapidez a la superficie emociones negativas y verdades desagradables, que quizá nosotros solos no sepamos como manejar. Sin embargo, bajo una guía cualificada, sus cualidades características nos pueden ser extremadamente valiosas. Aportándonos una profunda sanación del alma.
La obsidiana puede facilitar la vuelta a vidas pasadas, para curar traumas arrastrados hasta el presente. Tiene propiedades que favorecen a la meditación. Abre el chakra de la corona. Se asocia con el primer chakra y está vinculada a la tierra (enraíza desde el chackra base hasta el centro de la Tierra). Por esa cualidad de enraizar en la tierra, debería ser usada por quienes sueñan despiertos y tienen fantasías con facilidad, para ayudarlos a estar más cerca de la realidad y tocar con los pies en el suelo, siendo una inestimable ayuda en momentos Es útil también porque absorbe y aleja las energías negativas; siendo de gran ayuda para las personas muy sensibles, ya que bloquea los ataques psíquicos.
Es enemiga de la ilusión, denuncia al ego. Las bolas de Obsidiana sirven para meditar en ellas, pero el conocimiento que proporcionan es demasiado grande para ser asimilado con facilidad. Meditar con una obsidiana activa la energía del guerrero, cuando la persona se enfrenta a lo desconocido. Literalmente, es una piedra que te pone en contacto directo con tu sombra. Se trata de un mineral que arraiga, prepara para la acción y elimina el miedo. Es la piedra del que no quiere detenerse en su camino, del que necesita fuerzas para no decaer, del que busca infatigablemente, de aquel que puede hallar respuestas en donde otro nada ve.
Fuentes: Katrina Raphaell